Pero a veces, jugar se convierte en un lujo inalcanzable para muchos niños con discapacidades motrices. Porque solo un 13% de los juguetes inclusivos son aptos para niños con afecciones motrices. Y, además, un juguete adaptado cuesta hasta 6 veces más. Para estos padres, que ya tienen gastos extraordinarios, adquirir juguetes adaptados se convierte en un lujo y para sus hijos el lujo es jugar.
Por eso, este año volvemos a organizar la campaña de donación de juguetes inclusivos y dispositivos de comunicación. Y te necesitamos. ¿Te apuntas?
¡Conducir a Johnny es fácil! Conecta los 2 interruptores incluidos, presiona uno para avanzar y el otro para cambiar de dirección. Viene con control remoto. Es un juguete 100% inclusivo.
¡Los movimientos de baile y la energía de Frankie son contagiosos! Incluye 1 pulsador y las adaptaciones para hacer que Frankie mueva su cuello y alas, y también baile. Es 100% inclusivo.
¿Un divertido dinosaurio que lanza burbujas de fuego? ¡Sí! Incluye 1 pulsador y las adaptaciones para hacer burbujas, iluminarlo y reproducir música. Es 100% inclusivo.
Las limitaciones físicas o disfunciones del habla pueden ser un obstáculo para la comunicación de personas con diferentes afecciones como la parálisis cerebral, Síndrome de Rett o ELA. Pero, con la mirada, podemos dar voz a estas personas, porque hoy, hablar, jugar y relacionarse utilizando la mirada, es posible.
Solución completa de comunicación (CAA) ideal para personas que tienen limitaciones motoras y estén en etapas iniciales de aprendizaje.
L@s niñ@s tienen derecho a #jugar. ¿Qué pasa cuando por factores físicos no pueden? Un niñ@ sin juguetes, se los inventa. Un bote de jabón es una nave espacial. Y jugando, l@s niñ@s desarrollan la imaginación, comparten experiencias, negocian, se divierten. Pero, ¿Cómo hacemos con un niñ@ que por circunstancias ajenas a sí mism@ no usa las manos o no se comunica fácilmente?
En este webinar analizamos desde tres ángulos diferentes lo que supone el juego para los niños y cómo afecta su carencia. Una neuropediatra, una profesora que además tiene una empresa de desarrollo de parques infantiles inclusivos y una fisioterapeuta neuropediátrica.
Jugando socializamos, nos divertimos, aprendemos y desarrollamos aptitudes de nuestro cerebro que solo se desarrollan jugando. Jugar es algo natural y ninguno nos imaginamos la vida de cualquier niñ@ sin el juego. Incluso seguimos jugando de mayores y nos divertimos. Y nuestro cerebro se sigue beneficiando de jugar.
Aunque parezca absurdo, muchos niñ@s no pueden jugar, aunque quieran. Niñ@s que tienen ciertas discapacidades que les dificulta jugar con otros niños. Falta de opciones y recursos. Sus vidas se desarrollan de forma diferente. Para estos niños, jugar se convierte en un lujo.
En la pasada edición participaron empresas de la talla de las tecnológicas Samsung y Microsoft y se lograron 11 lotes de juguetes adaptados nuevos por valor de 12 mil euros, destinados a niñ@s de entre 3 y 10 años con diversidad funcional sensoriomotora de la Fundación Bobath.